En la jornada del jueves 12 de junio, efectivos de la Sección Núcleo de la Policía de Mendoza descubrieron una situación insólita durante un procedimiento de rutina en una zona rural de la ciudad de Malargüe: al requisar un automóvil, encontraron ejemplares caprinos vivos tanto en el baúl como en el asiento trasero del vehículo.

El operativo se llevó a cabo mientras los uniformados realizaban tareas de control y prevención. Al detener el rodado, en el que se trasladaban dos ciudadanos mayores de edad, procedieron a la inspección del interior del vehículo. Fue entonces cuando observaron la presencia de animales en condiciones impropias de traslado.
Ante el hecho, y por disposición de la Fiscalía de Instrucción de Malargüe, se procedió al secuestro de los caprinos. Posteriormente, los mismos fueron entregados a personal de la Policía Rural, encargado del resguardo y protección de la fauna ganadera.


Hasta el momento, no se han brindado mayores detalles sobre la procedencia de los animales ni la finalidad del traslado. La investigación continúa en curso.

