La bailarina malargüina Gisela Farina, de 28 años, fue la gran ganadora del Eurosol Latino 2025, una de las competencias más prestigiosas en ritmos latinos, realizada hace unos días en Godoy Cruz, Mendoza. La artista, que desde los 6 años abrazó la danza como parte esencial de su vida, obtuvo el primer puesto en la categoría profesional, logro que la habilita a representar a la provincia en la final nacional de Buenos Aires el próximo 11 y 12 de octubre.

Desde pequeña, Gisela supo que su camino estaría marcado por la danza. A los 6 años descubrió la magia de los escenarios y nunca más se apartó de ellos. Su talento la llevó a ser parte de vendimias departamentales de Malargüe, Godoy Cruz, Ciudad y Las Heras como así también monitora en la Vendimia de Maipú. Pero eso no es todo, la joven ha sido parte del elenco de bailarines en la Fiesta Nacional de la Vendimia en el Frank Romero Day. Hoy, tras años de formación, disciplina y entrega, celebra uno de los objetivos más importantes de su carrera.

En diálogo con Malalweb, Gisela relató: “Competí en la categoría profesional y salí campeona. Este logro es el primer paso para una nueva etapa en mi carrera como bailarina, después de dedicarme por mucho tiempo principalmente a dar clases. Ahora quiero buscar un reconocimiento más alto, a nivel país”, expresó emocionada.

Farina se trasladó a la Ciudad de Mendoza a los 18 años para seguir perfeccionándose. Actualmente es profesora de danzas clásicas y contemporáneas, además de impartir clases de bachata estilo femenino, disciplina en la que brilló en esta competencia. Con esfuerzo y dedicación, trabajó durante meses en cada detalle de su coreografía, desde la técnica hasta el vestuario: “Cada piedra de mi traje fue pegada artesanalmente, con muchas horas de sacrificio, y ver que todo valió la pena me pone muy feliz”.
La noche de la competencia tuvo un condimento especial: la compañía de sus seres queridos. Su familia viajó desde Malargüe para alentarla, junto a amigos, alumnos y colegas que hicieron sentir su apoyo. “En el escenario estaba sola, pero la hinchada era mucho más grande de lo que imaginé”, recordó.

El orgullo fue doble: como coreógrafa también presentó un dúo de bachata integrado por dos de sus alumnas, quienes se consagraron campeonas en su categoría.
Hija menor de Jacinto Farina y Gladis Bordón, y hermana de Débora, Gisela asegura que este logro no le pertenece solo a ella: “Se lo dedico a todos los que me acompañaron en el camino. A veces los sueños parecen lejanos, pero si los transformamos en metas, se vuelven posibles”.


Finalmente, dejó un mensaje inspirador: “Lo importante es respetar los tiempos, perseverar y atreverse. Los sueños se cumplen si uno los construye con esfuerzo y con amor”.