En una conferencia de prensa convocada por el Concejo Deliberante (HCD) de Malargüe, se presentaron datos alarmantes sobre las deudas que afectan a la Municipalidad local. Los concejales, después de una reunión con la contadora general del municipio, Gabriela Moyano y el tesorero de la misma, Pablo Cuello; hicieron un minucioso análisis de la situación financiera del municipio y compartieron detalles inquietantes que arrojan luz sobre la delicada situación económica que enfrenta la administración local.
Martín Palma, uno de los concejales presentes en la conferencia, destacó que una de las principales preocupaciones radica en la cantidad de deudas que la Municipalidad acumuló hasta el mes pasado. Además, resaltó “un error que involucra más de 300 millones de pesos de diferencia entre lo recaudado y lo pagado o devengado”. Así también enfatizó sobre la ausencia de rendiciones y documentos convenidos, como el informe de la Universidad Maza, que debían ser entregados al Concejo, el cual nunca habría llegado.
La falta de documentación requerida que, según el edil, debe ser proporcionada por la oficina del despacho y, específicamente, por el intendente, ha llevado a retrasos significativos en la labor del Concejo, ya que la información a menudo llega con varios meses de retraso. Además, resaltó la espera de un blanqueo de 93 millones de pesos en contratos o requerimientos cuyos detalles aún son desconocidos.
Rodrigo Hidalgo, otro concejal presente, señaló que varias irregularidades, como cortes de luz y problemas en el suministro de combustible, indican que la municipalidad podría estar enfrentando dificultades de liquidez. “En un año en el que es crucial ordenar las cuentas, estos problemas financieros se han convertido en un asunto de interés público.”, mencionó.
Francisco Parada, otro de los concejales, afirmó: “En agosto, la deuda corriente alcanzó los 274 millones de pesos, y aunque se lograron algunos avances en el pago de deudas con proveedores e YPF en rutas, aún no se han saldado por completo. Además, reveló que, para pagar los sueldos de los empleados, el municipio ha tenido que recurrir a préstamos bancarios, lo que genera intereses adicionales. La masa salarial de ese mes era de $211.405.000, necesarios para pagar a 1870 CUILES y 74 funcionarios. Una cifra que, según datos extraoficiales, ha aumentado significativamente desde que se aprobó el presupuesto en octubre de 2022, cuando solo había 47 funcionarios”.
Además, compartió la preocupante noticia de que el municipio carece de reservas o ahorros para situaciones de emergencia o, hipotéticamente, una caída en los ingresos por regalías, lo que dejaría a la situación financiera en una posición precaria.
Parada destacó que están solicitando urgentemente información actualizada sobre el programa de adecuación de deuda proyectado hasta diciembre. “La situación financiera del municipio es compleja”, sentenció el edil.