El evento lumínico que cruzó el cielo de Malargüe y otras provincias la noche del pasado viernes 3 de octubre generó gran asombro y especulaciones, con muchos testigos asegurando haber presenciado la caída de un meteorito. Sin embargo, la Dra. Beatriz García, astrónoma argentina, Investigadora Principal del CONICET y referente en proyectos científicos internacionales como el Observatorio Pierre Auger y QUBIC, instó a la comunidad y a los medios a utilizar la terminología científica precisa.

En diálogo con medios locales, la especialista explicó que, a pesar de lo espectacular del evento y de la luz vista en el cielo, es inadecuado hablar de un meteorito si no hay certeza de que el objeto “tocó el piso” o “llegó a la superficie de la Tierra”. “Para poder definir a este objeto como un meteorito, deberíamos estar absolutamente seguros de que tocó el piso, que llegó a la superficie de la Tierra. De lo cual no estamos seguros, por supuesto. Sí, vimos la luz en el cielo, fue un evento importante”, señaló García.
La Dra. García precisó que la definición correcta para esta bola de luz brillante que se observa en la atmósfera es bólido. “Cuando uno ve las luces en el cielo, lo que normalmente denominamos estrellas fugaces, se trata de un bólido. La definición adecuada es bólido. Es esa bola de luz brillante que aparece como una pequeña traza, después aumenta de brillo”.

Según el análisis de la astrónoma, el fenómeno habría alcanzado su máximo esplendor al estallar en la alta atmósfera, lo que parece ser el caso del evento del sábado pasado. Tras este estallido, “la luz decrece y la estela se extingue en la misma atmósfera”. Además, contó que aunque el objeto pudo no ser “enorme”, y explicó que tampoco se está seguro de su tamaño, su naturaleza sólida implica que, al estallar, habría liberado pequeñas partículas.
La investigadora del CONICET sugirió que solo en el caso de que estos fragmentos —algunos del tamaño de un grano de arena o más pequeños— hayan efectivamente llegado a la superficie, entonces se podría hablar de “micro-meteoritos”. “Si cayó algo a la superficie, no lo sabemos. Entonces, hablar de meteorito es inadecuado. Tal vez haya llegado algunos fragmentos porque este es un objeto sólido, de manera que al estallar quedan pequeñas partículas, algunas del tamaño de un grano de arena e inclusive más chiquitas. Y si llegaron a la superficie, entonces deberíamos hablar de micro-meteoritos”.

La Dra. García además agregó que este tipo de fenómenos es común. Lo que realmente ha cambiado en la actualidad es que hoy en día existen cámaras por doquier, teléfonos móviles, cámaras de seguridad etc. “La cantidad de materia que llega a la Tierra procedente del espacio interplanetario es mucha, entre dos y cinco toneladas por día. Solo que no toda lo que cae es visible, cae en el medio del mar, en el medio de selvas, de desiertos, en donde no hay población y mucho menos fotografiado. Pero, el evento fue interesante. La gente lo vio”
Finalmente, la astrónoma invitó a ser cautelosos con el lenguaje hasta tener pruebas concretas. “Por el momento, quedémonos con la denominación: bólido”.



