El Torneo Nacional de Newcom que se desarrolló en Malargüe no solo mostró partidos competitivos, sino también historias de vida, de esfuerzo y de comunidad. Los protagonistas fueron los propios jugadores, que compartieron cómo se formaron sus equipos, qué significa el deporte para ellos y cómo los une más allá de la cancha.

Para José Antonio “Tony”, de Santa Ana (Corrientes), viajar 1600 km hasta Malargüe fue mucho más que un desafío logístico: “Es la primera vez que venimos. Nos preparamos con tiempo y viajamos felices. La gente nos recibió de una manera increíble, muy cálida. Nos sentimos identificados porque venimos de un pueblo pequeño”. Su compañera Marcela agregó: “Nuestro pueblo es chiquito, con calles de tierra y mucha historia. Esta experiencia nos permite mostrar que el deporte une y que podemos llegar lejos, más allá de nuestro tamaño”.

Desde Santa Fe, en representación del equipo de ADN Newcom, Cristian relató cómo nació su equipo: “Empezamos hace dos años y medio con una actividad recreativa. Poco a poco se fue transformando en recreativo y competitivo. Lo más increíble es que jugadores de distintas disciplinas hoy compiten juntos en Newcom. Más allá de la edad, todos encontramos un espacio para disfrutar y superarnos”.

Diego, de ADN Newcom, coincidió: “Muchos de nuestros jugadores son exdeportistas y este deporte les permitió volver a formar parte de un equipo, revivir la adrenalina de la competencia y, sobre todo, compartir con otros jugadores de todo el país. El Newcom es más que un juego: es encuentro, amistad y salud”.

Fernando Monroy, del equipo Callejeros de Mendoza, destacó la conexión afectiva con Malargüe: “Amo Malargüe, estoy casado con Julia Olivera, malargüina, y cada vez que venimos es un placer. Más allá del deporte, se generan vínculos humanos muy fuertes, hacemos amigos y compartimos experiencias únicas”.

Para muchos, Newcom no es solo un deporte: es un punto de encuentro intergeneracional, un desafío físico y un vínculo social. Los testimonios de los jugadores muestran que detrás de cada equipo hay historias de esfuerzo, amistad y pasión que trascienden la competencia.



