Por la creciente del río que afectó a varios vecinos en sus puestos y veranadas, la comunidad de Poti Malal se vio enfrentada a una situación crítica. A pesar de la presencia de Defensa Civil, la falta de maquinaria para despejar la ruta dejó a numerosas personas sin la posibilidad de trasladarse en vehículos, generando la necesidad de buscar soluciones inmediatas.
Alex Vallejos, residente de la zona, expresó a Malalweb su preocupación sobre la situación: “Hay mucha gente aislada, la ruta está completamente cortada. Defensa Civil se hizo presente aquí, pero no trajeron ninguna respuesta. Se piden máquinas para que despejen la ruta porque hay mucha gente aislada. Hasta ahora, la gente está toda bien, pero por las dudas toca salir de emergencia, no se puede“.
Asimismo, contó que el domingo vecinos con pala y pico despejaron un camino porque había gente que tenía que pasar.
Dani Carrasco, otro vecino afectado, enfatizó: “Necesitamos que pasen la máquina“. De no poder conseguir una máquina, el puestero con veranada en la zona indicó que esperarán a que drene el barro para intentar arreglar el camino, como se pueda “a pala y picador“.
A pesar de la presencia de las autoridades municipales, la falta de maquinaria operativa y la burocracia gubernamental impidieron una respuesta inmediata.
El director de Defensa Civil expuso los obstáculos y acciones en Poti Malal
En este sentido, el director de Defensa Civil, Damián Contreras explicó a nuestro medio: “La gente quiere soluciones casi inmediatas, que es como ellos desean y como a nosotros nos gustaría“. Además, detalló la dificultad para llegar a algunos puntos críticos a causa de la falta de maquinaria operativa y las condiciones del terreno.
También relató las acciones tomadas por Defensa Civil: “La primera noche, el día sábado, salimos alrededor de las 20, llegando al último puesto en la zona de Pulcura alrededor de las 11 y media de la noche. Caminamos aproximadamente dos kilómetros porque el camino no permitía avanzar en vehículo“.
La comunidad se encuentra a la espera de soluciones y asistencia para restablecer el acceso a sus hogares y puestos afectados por la crecida del río. Mientras tanto, se organizan esfuerzos locales con picador y pala para despejar caminos alternativos.